El reconocimiento del principio de autonomía municipal representa una transformación democrática que convoca a la ampliación de la capacidad de decisión del municipio y significa un salto objetivo que crea bases jurídicas para que pueda alcanzarse mayor promoción y realización del desarrollo local, precisamente en el espacio de poder público político más cotidiano y cercano al ciudadano.
Para la realización de tal objetivo, en función del progreso económico y el desarrollo social de su territorio, el proyecto constitucional establece que los municipios cuentan con ingresos propios y las asignaciones que reciben del gobierno de la república.
Según lo delineado, los municipios podrían adquirir mayor relevancia en Cuba aparejada a su creciente autonomía, sin divorciarla de su subordinación a los intereses del Estado.
Prevista para sustituir a la vigente desde 1976, la nueva Carta Magna propone mantener las presentes misiones de las Asambleas Municipales del Poder Popular, entre ellas el control del plan económico, el desarrollo integral y la ejecución de las políticas del Estado para la demarcación.
Los municipios son entes políticos, integrantes del todo estatal, y en consecuencia, para que el Estado pueda cumplir con finalidades comunes, los municipios, como partes integrantes de ese todo estatal -como reconoce el proyecto constitucional-, deben ejercer la autonomía de conformidad con los principios de solidaridad, coordinación y colaboración con el resto de los territorios del país, y sin detrimento de los intereses superiores de la nación.
Se prevé potenciar la autonomía de los municipios en busca de una mayor descentralización y hacer más expeditas las decisiones, sin que por ello se pueda pensar en un rápido aumento de los recursos, muy limitados por el bloqueo estadounidense, la condición de país pobre y dificultades internas.
En el artículo 64 el Proyecto establece que la autonomía del municipio comprende la elección de sus autoridades, la facultad para decidir sobre la utilización de sus recursos y el ejercicio de las competencias que le corresponden, con arreglo a la Constitución y a las leyes.
En el contenido del actual Proyecto de Constitución de la República de Cuba figura igualmente la propuesta de extender el mandato de los delegados a nivel municipal a cinco años, el doble del actual, para ganar en preparación y experiencia.
Con información de la ACN y Radio Habana Cuba